La caída en la llegada de turistas a los destinos de playa en México genera impactos significativos en la industria turística del país.
Este fenómeno, marcado por una disminución constante desde abril, plantea retos que afectan la economía, el empleo y la promoción turística.
Cambios en las preferencias de los turistas
En septiembre de 2024, la llegada de turistas internacionales a destinos de playa cayó un 12.1% respecto al mismo mes del año anterior.
Esta cifra representa más de 90 mil visitantes menos en comparación con septiembre de 2023.
Al mismo tiempo, los destinos de ciudad registraron un aumento del 4.3% en visitantes internacionales, sumando más de 500 mil turistas.
Estos datos indican un cambio en las preferencias de los turistas, quienes optan por experiencias urbanas en lugar de las playas mexicanas.
Este comportamiento afecta directamente a los destinos de playa con menos turistas y obliga a replantear las estrategias de promoción turística.
Principales destinos afectados
El aeropuerto de Cancún, que concentra el 40.3% de las llegadas internacionales al país, experimentó una disminución del 13.6% en septiembre de 2024, lo que equivale a 74,751 visitantes menos.
Este impacto se ve reflejado en otros destinos de playa populares:
- Los Cabos tuvo una caída anual del 18.5%.
- Puerto Vallarta presentó una disminución del 16.4%.
- Zihuatanejo reportó un descenso del 15.3%.
- Cozumel mostró la mayor caída, con un 35.9%.
Por otro lado, destinos urbanos como Guadalajara, Querétaro y Monterrey registraron incrementos del 10.5%, 54.9% y 5.6%, respectivamente, destacando la diversificación en las llegadas internacionales.
Impacto económico de la caída turística
La disminución de visitantes en los destinos de playa con menos turistas tiene implicaciones económicas importantes.
Estos destinos dependen en gran medida del turismo internacional, especialmente de mercados clave como Estados Unidos y Canadá, que representan el 62.8% de los visitantes internacionales a Cancún.
La pérdida de visitantes no solo afecta a hoteles y restaurantes, sino también a empleos locales y cadenas de suministro.
Por ejemplo, la reducción del 11.4% en el mercado estadounidense y del 9.9% en el canadiense afecta la ocupación hotelera y el gasto promedio por turista.
Además, el mercado europeo, que representa el 14.3% de los visitantes en Cancún, también mostró variaciones negativas significativas.
Países como Francia, Alemania y España registraron disminuciones del 30.1%, 17.2% y 14.9%, respectivamente.
Retos para la promoción turística
La promoción de los destinos de playa con menos turistas enfrenta varios desafíos.
Las cifras muestran que destinos como Cancún y Los Cabos siguen siendo altamente dependientes del mercado estadounidense.
Sin embargo, las caídas en este mercado obligan a explorar estrategias más diversificadas.
Por ejemplo, destinos urbanos como Guadalajara han tenido éxito al atraer visitantes de mercados no tradicionales.
Durante septiembre de 2024, esta ciudad reportó un crecimiento del 10.5% en la llegada de turistas internacionales, con un aumento notable de visitantes asiáticos como los provenientes de China, que crecieron un 16.3%.
La promoción de las playas mexicanas necesita adaptarse para atraer a mercados emergentes y reactivar los tradicionales.
Esto incluye campañas que muestren el valor de visitar estos destinos, con un enfoque en sostenibilidad, seguridad y experiencias únicas.
Perspectivas para el futuro
La caída en la llegada de turistas internacionales a los destinos de playa con menos turistas no solo afecta a las economías locales, sino también a la imagen turística de México en el extranjero.
A partir de abril de 2024, las llegadas internacionales comenzaron a desacelerarse, acumulando cifras negativas en los principales destinos de playa para septiembre.
Por el contrario, los destinos urbanos han mantenido un crecimiento constante durante diez meses consecutivos, lo que plantea preguntas sobre cómo las playas mexicanas pueden competir en este contexto.
Un punto importante para abordar este problema es diversificar las actividades y experiencias que ofrecen los destinos de playa.
Integrar opciones culturales, históricas y gastronómicas puede ayudar a captar nuevos segmentos de mercado.
Además, mejorar la conectividad aérea y terrestre entre destinos urbanos y de playa podría incentivar visitas a ambas regiones.
Este enfoque integrado no solo beneficiará a las playas mexicanas, sino que también impulsará el turismo en todo el país.
Menos turistas un área de oportunidad
La disminución en la llegada de turistas internacionales a los destinos de playa plantea un problema crítico para la industria turística de México.
¿Será que Las cifras revelan un cambio en las preferencias de los viajeros, quienes ahora buscan experiencias urbanas?.
Para revertir esta tendencia, es esencial replantear las estrategias de promoción y diversificación turística.
Además, la colaboración entre los sectores público y privado será clave para reactivar estos destinos y fortalecer la economía local.
La industria turística debe adaptarse a las nuevas dinámicas del mercado global.
Solo a través de la innovación y la diversificación será posible recuperar el protagonismo de los destinos de playa en México.